La Iglesia llama a la unidad y a construir una paz duradera en México
En un contexto de desafíos y tensiones sociales, la Arquidiócesis Primada de México hizo un firme llamado a la unidad y a trabajar por “una paz sólida y duradera” en el país. Este mensaje, emitido en el editorial del semanario Desde la Fe, subraya la urgencia de acabar con la violencia y fomentar el diálogo entre todos los sectores de la sociedad para construir un México mejor.
La Iglesia destacó que su postura no tiene intenciones de confrontar a grupos políticos o funcionarios específicos, sino de invitar a toda la ciudadanía a unir esfuerzos en pro de un futuro de esperanza y justicia. “Es un llamado a toda la sociedad para que juntos, en diálogo, construyamos un futuro mejor”, enfatizó el editorial.
Este mensaje llega en el marco del inicio de las tradicionales posadas navideñas, una época que simboliza esperanza, reconciliación y fraternidad. La Arquidiócesis enfatizó que “la buena política, aquella que prioriza la defensa de la vida y la dignidad humana, está al servicio de la paz”. Añadió que, para los cristianos, trabajar por la paz no es opcional, sino el corazón mismo de su misión y su compromiso con la sociedad.
La misa dominical celebrada en la Basílica de Guadalupe también fue un escenario para este llamado a la unión y la paz. Durante la ceremonia, a la que asistió Ken Salazar, embajador de Estados Unidos en México, se elevó una plegaria especial “por la unión, para que todos los mexicanos, sin distinción, permanezcamos firmes en la esperanza y trabajemos juntos por un México mejor”. Este gesto simbólico reforzó el mensaje de fraternidad y colaboración que la Iglesia busca impulsar.
En otra petición durante la misa, el sacerdote exhortó a los fieles a aprovechar estos días para demostrar que “la paz es posible y necesaria”. Además, señaló que fortalecer este compromiso contribuirá al Diálogo Nacional por la Paz, una iniciativa que busca erradicar la violencia y fomentar el entendimiento mutuo en el país.
El editorial de Desde la Fe no solo denunció la violencia y las divisiones que aquejan a México, sino que también ofreció un mensaje de introspección y responsabilidad personal: “La paz empieza en nosotros mismos, y se construye día a día”. Este recordatorio destaca la importancia de que cada individuo contribuya desde su entorno inmediato a la pacificación del país.
La publicación extendió un llamado a la solidaridad, instando a los feligreses a compartir con quienes más lo necesitan: “con quienes duermen en la calle, con los migrantes, los presos, los enfermos, los que están solos, los deprimidos, los oprimidos, los expulsados, los ancianos, los humillados, los abandonados y las familias que buscan a sus hijos desaparecidos”. Esta exhortación subraya que la paz también se construye con actos concretos de empatía y ayuda a los más vulnerables.
En tiempos marcados por la incertidumbre y el dolor de tantas familias afectadas por la violencia, la Iglesia invita a redoblar los esfuerzos para crear una sociedad donde prevalezcan la justicia, el respeto y la dignidad humana. La celebración de la Navidad, símbolo de luz y esperanza, es una oportunidad para reflexionar y trabajar unidos por un México en paz.
El mensaje de la Arquidiócesis Primada de México resuena como una guía espiritual y social en estos tiempos difíciles. Un llamado claro a no perder la esperanza y a construir, entre todos, un país más justo, solidario y pacífico.