FGR incinera más de cuatro millones de cigarros y narcóticos en Yucatán
En una contundente acción contra el narcotráfico, la Fiscalía General de la República (FGR) llevó a cabo la incineración de grandes cantidades de drogas, cigarros ilegales y otros objetos relacionados con delitos en el estado de Yucatán. Este acto de destrucción, supervisado en las instalaciones de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), subraya el compromiso del gobierno mexicano en la lucha contra el tráfico de estupefacientes y productos ilegales.
Durante la diligencia, se destruyeron un total de cuatro millones 22 mil 066 unidades de cigarros que ingresaron ilegalmente al país, además de una variedad de narcóticos decomisados en diversas operaciones. Entre las sustancias destruidas, se contabilizaron 60 kilos con 85 gramos de mariguana, 2,600 plantas de cannabis, tres kilos de metanfetamina, un kilo con 924 gramos de cocaína y 855 pastillas psicotrópicas. Estos decomisos forman parte de los esfuerzos que la FGR ha implementado en coordinación con distintas fuerzas de seguridad para reducir la presencia de drogas en las calles y combatir la venta ilegal de productos que dañan la salud pública.
La diligencia de incineración se realizó bajo estrictas medidas de seguridad y transparencia. En el evento, participaron representantes de la Sedena, de la Fiscalía Estatal, así como de la Policía Federal Ministerial (PFM) y del Órgano Interno de Control, quienes verificaron el peso y autenticidad de los estupefacientes, garantizando así la correcta ejecución de la destrucción de estos artículos ilegales.
Este tipo de acciones enérgicas forman parte de la estrategia nacional contra el narcotráfico y los delitos relacionados, dirigida a desarticular las redes de distribución de drogas y productos ilícitos. La FGR reiteró que continuará llevando a cabo estas operaciones de incineración de manera regular, en colaboración con fuerzas de seguridad y autoridades de control, para asegurar que los objetos incautados en investigaciones criminales sean destruidos de acuerdo con la normativa y bajo supervisión oficial.
Con este tipo de esfuerzos, la Fiscalía y la Sedena refuerzan su compromiso con la ciudadanía, buscando no solo desarticular estructuras de venta y distribución de drogas, sino también contribuir a la paz y seguridad en Yucatán y en el resto del país.