Descartan narcoterrorismo en ataques con coches bomba en Guanajuato: “Es una disputa territorial”, asegura Sheinbaum

La presidenta Claudia Sheinbaum rechazó considerar los recientes ataques con coches bomba en los municipios de Acámbaro y Jerécuaro, Guanajuato, como actos de narcoterrorismo, aclarando que se tratan de incidentes derivados de una disputa entre grupos criminales por el control territorial. Durante la conferencia presidencial en Los Cabos, Baja California Sur, Sheinbaum anunció que en la próxima presentación del informe mensual de seguridad se ampliará la definición y tipificación de lo que puede considerarse como terrorismo, distanciando estos eventos de esa categoría.

Omar García Harfuch, secretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, respaldó esta postura y señaló que el término “terrorismo” generalmente responde a motivaciones religiosas o ideológicas, y no a conflictos internos entre organizaciones criminales. “Aquí la disputa es entre dos grupos delictivos que buscan amedrentar tanto a la autoridad como a sus rivales por el control del territorio y la venta de drogas e hidrocarburos”, explicó García Harfuch.

El funcionario agregó que este tipo de incidentes podría estar vinculado a autoridades locales que, posiblemente, estén alineadas con uno de los grupos criminales en disputa o que, simplemente, busquen combatir su influencia. En este caso, mencionó que los ataques se relacionan con un conflicto entre el Cártel Jalisco Nueva Generación y un grupo delictivo local que lucha por la plaza.

García Harfuch dio detalles adicionales sobre el desarrollo de los eventos, informando que el pasado 16 de octubre, la policía de Acámbaro decomisó equipo táctico y recuperó vehículos robados pertenecientes a uno de estos grupos criminales. En represalia, el director de la policía de Acámbaro recibió amenazas de muerte, y poco después, en la madrugada del jueves, se registró el incendio de una patrulla municipal, seguido de la detonación de un coche bomba frente a la corporación de policía en Acámbaro y otro estallido similar en Jerécuaro.

La Fiscalía General de la República (FGR) asumió la investigación de estos atentados debido al uso de explosivos, con el objetivo de apoyar a las autoridades locales y esclarecer el alcance y los responsables de estos ataques. García Harfuch puntualizó que los delitos bajo investigación incluyen lesiones a agentes de policía, daños a la propiedad y ataques contra autoridades.

En Guanajuato, el secretario de Seguridad y Paz, Juan Mauro González Martínez, confirmó la detención de tres presuntos miembros de uno de los grupos delictivos en Acámbaro, así como la incautación de armas y una camioneta relacionada con los ataques. La alcaldesa de Acámbaro, Claudia Silva Campos, y su secretario de Seguridad recibieron amenazas de muerte, motivo por el cual se activaron protocolos especiales de protección.

Por su parte, la gobernadora del estado, Libia García Muñoz Ledo, subrayó la gravedad de los ataques y la necesidad de garantizar que los mandos de seguridad en todos los municipios cumplan con los controles de confianza. En relación a la investigación, precisó que la FGR analizará el tipo de fabricación de los explosivos para determinar si fueron de “maquila casera” o de elaboración más sofisticada.

Finalmente, García Muñoz Ledo aseguró que estos actos, que dejaron tres policías lesionados y causaron daños materiales, deben ser tratados con rigor y sancionados conforme a la ley, como parte de los esfuerzos del estado y la federación para reducir la impunidad y preservar la paz en Guanajuato.