Calica enfrenta acusaciones por devastación ambiental y evasión fiscal en el sureste de México

La secretaria del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Alicia Bárcena, acusó a Calizas Industriales del Carmen (Calica), filial de la estadounidense Vulcan Materials, de incurrir en falsedades sistemáticas y prácticas abusivas durante su operación en el sureste de México, lo que ha derivado en graves daños ecológicos. Bárcena sostuvo que la empresa ha sobreexplotado el terreno concesionado desde 1986, y reportado menor extracción de piedra caliza para evadir impuestos y minimizar el impacto ambiental causado.

Durante la conferencia matutina, Bárcena destacó que la explotación de Calica ha afectado 1,200 hectáreas en Playa del Carmen y Cozumel, ocasionando devastación ambiental, al extraer piedra caliza para exportarla a Estados Unidos y usarla en la construcción de carreteras. La explotación ha dañado el manto freático, afectando el ciclo hidrológico de una zona rica en cenotes. Bárcena informó que de los 17 cenotes presentes, 13 resultaron dañados y al menos tres quedaron destruidos por completo.

En respuesta a estos daños, el pasado 23 de septiembre, el presidente Andrés Manuel López Obrador emitió un decreto que declaró la zona como área natural protegida, junto con otras 50 mil hectáreas. Bárcena subrayó que no se trata de una expropiación, ya que el terreno sigue siendo propiedad de la empresa, pero ahora tienen prohibido extraer más caliza. “Deben restaurar el área, plantar bosque o hacer algo, pero no extraer caliza”, afirmó la secretaria.

Calica ha demandado al gobierno de México por 1,500 millones de dólares, utilizando el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), debido a la prohibición de seguir extrayendo caliza desde el decreto presidencial. Sin embargo, Bárcena señaló que la empresa no cuenta con permisos vigentes desde diciembre de 2020, ya que sus concesiones fueron canceladas por la administración anterior debido a sus excesos en la explotación.

Bárcena denunció además que Calica reportó cantidades diferentes de reservas de material pétreo a las autoridades mexicanas y estadounidenses, con el objetivo de evadir impuestos. Mientras que a las autoridades mexicanas informó un volumen menor, ante la bolsa de valores de Estados Unidos, donde cotiza, reportó el doble de reservas.

El impacto ambiental de la explotación de Calica ha sido grave, según Bárcena, superando 20 veces el volumen autorizado de extracción, lo que ha afectado significativamente el sistema hidrológico subterráneo de la región. La titular de Semarnat explicó que, en este contexto, el gobierno federal trabaja en un plan nacional de restauración que abarcará ecosistemas degradados y áreas naturales protegidas. Con este programa, se busca restaurar el 20% del territorio nacional, sanear ríos como el Tula, Lerma, Atoyac y Sonora, recuperar el 30% de los manglares y reforestar el 10% de los bosques y selvas en nueve estados.

Además, Bárcena señaló que México avanza en sus compromisos globales, como la agenda 30-30-30, que busca proteger el 30% de las áreas terrestres y marinas para 2030. La presidenta Claudia Sheinbaum también está impulsando proyectos como la economía circular, que incluye el reciclaje de materiales, para lo cual se utilizará el terreno en Tula expropiado para la fallida refinería de Felipe Calderón, ahora destinado a una planta de reciclaje.

Otro proyecto destacado por Bárcena es el reciclaje de materiales de construcción, como el cascajo, que podrá ser reutilizado en la fabricación de adocreto para carreteras, contribuyendo así a una economía más sostenible y reduciendo el impacto ambiental de la construcción.