México pierde 4.89 millones de hectáreas de ecosistemas y enfrenta graves retos ambientales, alerta WWF

En los últimos 22 años, México ha perdido aproximadamente 4.89 millones de hectáreas de ecosistemas naturales, una superficie comparable a la de Costa Rica, según reveló este miércoles el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) durante la presentación de su informe “Planeta Vivo 2024”. Esta alarmante cifra es un reflejo de la degradación ambiental que enfrenta el país, que también pone en riesgo la supervivencia de mil 573 especies.

En una conferencia de prensa realizada en el Castillo de Chapultepec, María José Villanueva, directora de conservación de WWF México, destacó que la agricultura y la ganadería no sostenibles son las principales causas de deforestación en el país. Asimismo, informó que el 42% de los acuíferos en México ya no cuentan con disponibilidad de agua, lo que agrava aún más la situación ambiental.

Villanueva subrayó que México es el segundo mayor emisor de gases de efecto invernadero en América Latina, solo detrás de Brasil, lo cual aumenta el impacto negativo sobre los ecosistemas y contribuye al cambio climático. Explicó que la pérdida de ecosistemas no solo genera emisiones de gases contaminantes, sino que también disminuye la capacidad del país para capturar estos gases y enfrentar fenómenos climáticos extremos. Entre estos fenómenos, destacó la creciente frecuencia de huracanes, como el huracán John, que afectó gravemente a las costas de Guerrero y Oaxaca, impactando directamente al sector turístico.

Ante este panorama, WWF México presentó su plan “La naturaleza de vuelta”, cuyo objetivo es conservar el 30% de las zonas terrestres, acuíferas y marinas del país para el año 2030. El plan busca restaurar 500 mil hectáreas de áreas naturales y mejorar el estado de especies clave como el jaguar, la mariposa monarca y las ballenas, que son fundamentales para la biodiversidad de México.

Jorge Rickards, director general de WWF para México, añadió que la situación ambiental a nivel global es igualmente preocupante. El informe “Planeta Vivo 2024” revela un catastrófico declive del 73% en la abundancia poblacional de mamíferos, reptiles, aves, peces y anfibios monitoreados entre 1970 y 2020. América Latina y el Caribe son las regiones más afectadas, con una disminución del 94% en sus especies.

Rickards advirtió que el planeta se encuentra en un punto crítico, cerca de los llamados “puntos de inflexión”, que podrían tener consecuencias devastadoras para la humanidad si no se toman medidas urgentes para frenar el calentamiento global y restaurar los ecosistemas.

El informe “Planeta Vivo 2024” de WWF llama a la acción inmediata para enfrentar la crisis ambiental global. En México, la urgencia de detener la deforestación, restaurar los ecosistemas y proteger las especies en peligro es crucial para garantizar la salud del medio ambiente y la calidad de vida de las futuras generaciones.