Industria de videojuegos en México: un crecimiento imparable que transforma la economía
La industria global de los videojuegos sigue en ascenso, proyectando ganancias por 187 mil 700 millones de dólares al cierre de 2024, lo que equivale a 3 billones 754 mil millones de pesos. Este crecimiento del 2.1 por ciento respecto al año anterior refleja la fortaleza de un mercado que abarca desde consolas y juegos hasta accesorios, mercancía oficial y servicios de juego en línea. México, como parte de esta tendencia, destaca con un aumento significativo en su mercado, el cual generó alrededor de 39 mil 99 millones de pesos en 2023, incrementándose en 3.9 por ciento en comparación con el año anterior.
El impacto de esta industria no se limita a los ingresos directos, sino que ha transformado la estructura educativa y profesional del país. Universidades han incorporado carreras especializadas en diseño y desarrollo de videojuegos, mientras que los eSports han emergido como un fenómeno cultural y económico, atrayendo a jugadores profesionales tratados como atletas de alto rendimiento.
Según el Reporte mundial del mercado de videojuegos realizado por la firma Newzoo, especializada en el sector, en los últimos 11 años, las ganancias del mercado solo disminuyeron en 2022, pero repuntaron en 2023 con un 0.6 por ciento de crecimiento. Para 2027, se espera que la industria alcance los 213 mil 300 millones de dólares, más de 4 billones 266 mil millones de pesos. Este crecimiento se verá impulsado por la expansión de los jugadores en línea, cuya cifra superará los mil 670 millones para 2027, con un total global de 3 mil 420 millones de jugadores estimados para 2024.
En términos geográficos, Asia-Pacífico lidera con mil 809 millones de jugadores, el 53 por ciento del total mundial, seguido por África y Medio Oriente con 559 millones, Europa con 454 millones, Latinoamérica con 355 millones y Norteamérica con 244 millones. Aunque Asia-Pacífico domina en número de jugadores, el crecimiento más acelerado se proyecta en África y Medio Oriente, con un incremento del 8.2 por ciento, seguido por Latinoamérica, donde México se incluye, con un 5.6 por ciento.
Las ganancias provendrán principalmente de los juegos de teléfonos celulares, que representan el 49 por ciento del total, es decir, 92 mil 600 millones de dólares. Los juegos de consola contribuirán con el 28 por ciento, y los videojuegos de escritorio, con el 23 por ciento restante. Estos porcentajes reflejan un crecimiento constante en cada segmento, impulsado por la democratización del acceso a dispositivos móviles y la expansión del juego en línea.
Sin embargo, a pesar del crecimiento, los costos de desarrollo están comenzando a superar las capacidades de muchos estudios. Newzoo advierte que la rentabilidad rápida que antes caracterizaba a la industria ya no es tan accesible, obligando a los desarrolladores a adaptarse a un entorno económico más exigente. Ejemplos como el de Grand Theft Auto V, un éxito con un presupuesto de 265 millones de dólares, subrayan la importancia de la mercadotecnia y la estrategia en este contexto.
En México, la industria sigue consolidándose. Según Gonzalo Rojón, director de análisis de The CIU, seis de cada 10 personas en el país juegan videojuegos, una cifra que podría aumentar a ocho de cada 10 para el final de la década. Este crecimiento está impulsado por una generación que creció con la industria y que ahora inculca el gusto por los videojuegos en sus hijos, consolidando esta forma de entretenimiento como parte integral de la cultura mexicana.
En conclusión, la industria de los videojuegos en México y en el mundo no muestra signos de desaceleración. Con la innovación constante en tecnología, como la realidad aumentada y la conectividad mejorada, se espera que esta industria siga siendo un pilar importante en la economía global y en la vida diaria de millones de personas.