Entrega de Equipos Obsoletos a Bomberos en Nuevo Laredo: Un Riesgo para Todos
La reciente entrega de equipos por parte del Gobierno Municipal de Nuevo Laredo, encabezado por la alcaldesa Carmen Lilia Canturosas, ha generado una fuerte polémica al poner en evidencia las condiciones precarias en las que se encuentra el cuerpo de Bomberos de la ciudad. A menos de un mes de la inauguración de la Agencia Nacional de Aduanas de México en la región, la seguridad de los bomberos y los ciudadanos parece haber sido dejada de lado, tras la entrega de unidades obsoletas y peligrosas para el servicio de emergencia.
Durante la celebración del Día del Bombero, la administración municipal entregó dos unidades de emergencia: una máquina apagadora modelo 1998 y una ambulancia modelo 2007. Sin embargo, estos vehículos, donados por la ciudad de Laredo, Texas, han superado con creces su vida útil y se encuentran en un estado deplorable, según denunciaron los propios bomberos. Estas unidades, lejos de ser una mejora, representan un riesgo latente tanto para los elementos de Protección Civil como para la ciudadanía.
Un bombero, que pidió mantenerse en el anonimato, expresó su preocupación por la seguridad al utilizar estos vehículos. “La máquina apagadora tiene las llantas lisas, el motor humea y las tomas para las mangueras están oxidadas. No está equipada ni es segura para el combate de incendios”, afirmó. Además, reveló que el personal se ve obligado a trabajar con equipos donados de segunda mano que han sido utilizados previamente por bomberos de Estados Unidos, y que también han sobrepasado su vida útil.
Carmen Lilia Canturosas, a pesar de las críticas, aseguró públicamente que las unidades entregadas estaban completamente equipadas y en buen estado. Sin embargo, la realidad es otra. Apenas terminó la ceremonia, las unidades fueron llevadas al taller mecánico debido a las serias deficiencias que presentaban, como parabrisas estrellados y neumáticos en mal estado. Esta situación ha generado un clima de desconfianza y molestia entre el cuerpo de Bomberos, que se siente desatendido y en peligro.
Por su parte, el secretario del ayuntamiento, Juan Ángel Martínez, y el director de Protección Civil y Bomberos, Humberto Fernández, intentaron justificar la entrega de estos equipos obsoletos, argumentando que aún eran funcionales. Sin embargo, las evidentes fallas de las unidades y la falta de equipamiento adecuado contradicen sus declaraciones, lo que ha dejado en entredicho la gestión municipal en este aspecto.
La situación en las estaciones de bomberos de Nuevo Laredo es alarmante. La Estación Central alberga la máquina apagadora entregada, la cual está en condiciones tan deplorables que no puede ser utilizada. En la Estación 4, cuatro máquinas apagadoras están descompuestas, mientras que en la Estación 5, una unidad de ataque rápido lleva más de un año fuera de servicio. En emergencias con productos peligrosos, los bomberos solo cuentan con tres equipos de respiración autónoma, cuyos arneses han sido reparados de manera improvisada por los mismos elementos.
La falta de equipo adecuado, como botas, cascos y trajes contra el fuego en buen estado, pone en riesgo la vida de los bomberos, quienes diariamente enfrentan situaciones de alto peligro para proteger a la comunidad. Este abandono por parte del gobierno municipal no solo compromete la seguridad del personal, sino que también pone en peligro a la ciudadanía.
Es imperativo que la administración de Carmen Lilia Canturosas tome medidas urgentes para dotar al cuerpo de Bomberos de Nuevo Laredo con el equipo necesario para realizar su labor de manera segura y eficiente. La simulación y la entrega de equipos obsoletos no pueden ser la respuesta ante la creciente demanda de seguridad en la región.