Alerta máxima por incendios forestales en México: aumentan las hectáreas afectadas

Los incendios forestales activos en México continúan su devastador avance, afectando hasta la fecha 101,593 hectáreas, lo que representa un incremento de 8,000 hectáreas en solo un día, según informó la Comisión Nacional Forestal (Conafor). Este incremento se registra en un contexto en el que 198 conflagraciones están activas en 24 estados del país, con Guerrero y Chiapas reportando el mayor número de siniestros, con 28 cada uno.

Desde el inicio de 2023, la cifra acumulada de superficie afectada alcanza las 228,920 hectáreas, aunque esta cifra es significativamente menor comparada con los 429,000 hectáreas registradas en el mismo período del año pasado. A pesar de esta reducción anual, el año en curso se mantiene como uno de los más críticos en términos de superficie total dañada por incendios desde que se tiene registro.

La situación ha llevado a la suspensión de clases en varios municipios afectados por la contaminación derivada de los incendios, incluyendo Chilpancingo y Acapulco en Guerrero, donde las autoridades han tomado medidas para proteger la salud de los estudiantes y el personal docente.

Las regiones más afectadas durante la semana del 3 al 9 de mayo incluyen Sinaloa, Jalisco, Guerrero, Durango y el Estado de México, que juntos representaron el 99% del total de la superficie quemada en ese período. Conafor también destacó que, en lo que va del año, se han registrado 3,788 siniestros en todas las entidades federativas del país.

En términos históricos, 2023 se perfila como el año con la segunda mayor superficie siniestrada desde 1998, año en que se vieron afectadas más de un millón de hectáreas. Los esfuerzos para combatir los incendios en curso son extensos, con más de 300 brigadistas trabajando en distintos focos a nivel nacional, incluyendo personal del Ejército Mexicano, la Guardia Nacional, Conafor, y voluntarios.

El impacto ambiental de estos incendios es severo, afectando no solo la flora y la fauna locales, sino también la calidad del aire y la vida de las comunidades cercanas. Los estados con mayor área siniestrada incluyen Jalisco, Chiapas, Guerrero, Estado de México, Oaxaca, Sinaloa, Durango, Michoacán, San Luis Potosí y Puebla, que juntos suman el 83% del total nacional.

Esta serie de incendios subraya la urgencia de adoptar medidas preventivas más robustas y de mejorar las capacidades de respuesta a emergencias para mitigar los efectos de estos desastres naturales en el futuro.