Crisis de Desplazamiento en América Latina: Un Reto Humanitario y Judicial

Renee Cuijpers, representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), ha puesto de manifiesto la alarmante situación de desplazamiento forzado que enfrenta América Latina, con más de 22 millones de personas afectadas por esta problemática. Durante una conferencia reciente, Cuijpers reveló que, de este total, aproximadamente 380 mil personas han sido desplazadas en México debido a la violencia, resaltando la magnitud del desafío humanitario en el país.

Este anuncio se produjo en el contexto de la presentación de la convocatoria para el Premio Sentencias 2024, una iniciativa que busca reconocer y promover las mejores prácticas judiciales en materia de derechos humanos para las personas migrantes y refugiadas en las Américas. El premio enfatiza la importancia de garantizar el acceso a la justicia y el respeto por los derechos humanos de las poblaciones vulnerables, particularmente en situaciones de desplazamiento y migración forzada.

La representante de Acnur destacó que entre los desplazados, 7 millones son venezolanos y otros 7 millones provienen de países como Colombia, El Salvador y Honduras. México, por su parte, se ha convertido en uno de los cinco países con más solicitudes de asilo, recibiendo 273 mil nuevas peticiones en 2023. Estas solicitudes proceden principalmente de Haití, Cuba, Nicaragua y Venezuela, aunque ciudadanos de más de 100 países han buscado protección en territorio mexicano.

La gravedad de la situación se acentúa al considerar que muchas de las personas desplazadas internamente en México, estimadas en unas 360 mil, no cuentan con un registro oficial y son monitoreadas principalmente por organizaciones de derechos humanos. Esto indica una complejidad y una magnitud del problema que requieren una atención urgente y sostenida.

El Premio Sentencias se enfoca este año en dos temas cruciales: el acceso a la identidad y el principio de no devolución. Estos temas son fundamentales para asegurar que las personas en necesidad de protección internacional no solo sean reconocidas legalmente sino que también tengan garantizados sus derechos básicos sin el riesgo de ser devueltas a situaciones de peligro.

Esta iniciativa y los esfuerzos continuos de Acnur subrayan la necesidad de una cooperación regional e internacional más fuerte para abordar las causas y consecuencias del desplazamiento forzado. Asimismo, reiteran la importancia de las decisiones judiciales que respetan y promueven los derechos humanos, ofreciendo esperanza y apoyo legal a aquellos que enfrentan condiciones de gran vulnerabilidad.