Adaptación escolar en Michoacán frente a la ola de calor

Morelia, Mich. — Ante la intensa ola de calor que azota las regiones de Tierra Caliente y Costa en Michoacán, la Secretaría de Educación del Estado (SEE) ha implementado una medida preventiva para proteger la salud y bienestar de los estudiantes. A partir de este lunes, más de 3,400 escuelas de 25 municipios del estado han modificado sus horarios de clases, buscando así mitigar los efectos del calor extremo que se ha registrado en estas áreas.

La SEE informó mediante un comunicado que los ajustes horarios afectarán a los planteles de nivel básico, donde se ha permitido a los directivos, supervisores y jefes de sector decidir si el cambio será de 30 o 60 minutos. Esto implicará que el turno matutino comenzará más temprano y el vespertino finalizará más tarde, adaptándose de esta manera a las condiciones climáticas más frescas del día.

Los municipios beneficiados por esta medida incluyen Aquila, Arteaga, Carácuaro, Coahuayana, Coalcomán, Chinicuila, Churumuco, Lázaro Cárdenas, Tumbiscatío, Apatzingán, Buenavista, Múgica, Parácuaro, La Huacana, Tepalcatepec, Aguililla, Gabriel Zamora, Nuevo Urecho, Huetamo, Tacámbaro, Turicato, Tiquicheo, Tuzantla, Nocupétaro y San Lucas. En estas localidades, se ha visto un incremento significativo en las temperaturas, lo cual ha encendido las alertas de las autoridades educativas.

La SEE enfatizó la importancia de garantizar que, a pesar de los cambios de horario, se cumplan todas las horas de clases establecidas en el plan de estudios. Además, se ha dado instrucciones para que los niños sean adecuadamente hidratados y se encuentren bajo constante observación de los maestros durante las horas escolares, con el fin de prevenir cualquier incidente relacionado con el calor.

Esta acción es un reflejo del compromiso del gobierno estatal con la seguridad y la educación de los niños michoacanos, adaptando las políticas educativas a las necesidades y retos impuestos por el cambio climático y situaciones meteorológicas extremas. Con medidas como estas, Michoacán busca asegurar un ambiente educativo seguro y propicio para el aprendizaje, incluso en circunstancias climáticas adversas.