Avances Significativos en la Soberanía Energética de México
En un movimiento estratégico hacia la autosuficiencia y fortalecimiento energético, México ha logrado un hito importante al reducir significativamente su dependencia de las importaciones de gasolina. Al inicio de la actual administración, el país dependía en un 80% de las gasolinas importadas para satisfacer su demanda interna. Este porcentaje ha visto una reducción notable hasta el 57% en el último mes, de acuerdo con los últimos datos revelados por Petróleos Mexicanos (Pemex).
Este logro no es menor, considerando que en diciembre de 2018, de los 745.5 mil barriles diarios de gasolinas que se vendían en el mercado nacional, 616.3 mil eran importados, representando el 82.6% del total. La reciente actualización de Pemex indica que, en febrero de este año, se comercializaron internamente 653.5 mil barriles diarios, de los cuales 376.3 mil fueron importados, lo que equivale a un 57.5% del total.
Este progreso hacia la autosuficiencia energética responde a uno de los objetivos centrales del gobierno actual, marcando un punto de inflexión en la política energética del país. El director general de Pemex, Octavio Romero Oropeza, ha reafirmado el compromiso de la administración con este objetivo, señalando que la meta de alcanzar la autosuficiencia de gasolinas se cumplirá en 2025, gracias a la integración plena de la refinería de Deer Park en Estados Unidos, las plantas coquizadoras en construcción y el sistema nacional de refinación, incluida la nueva refinería de Dos Bocas, Tabasco.
Esta trayectoria hacia la soberanía energética no solo implica un cambio significativo en la estructura de la oferta interna de combustibles, sino que también representa un firme paso hacia la reducción de la vulnerabilidad externa y el fortalecimiento de la economía nacional. Además, el esfuerzo por alcanzar la autosuficiencia se ve reflejado en una disminución del 8.01% en la importación de gasolinas en febrero respecto al mismo mes del año anterior, consolidando aún más el camino hacia la independencia energética de México.
El compromiso del gobierno con esta ambiciosa meta se manifiesta no solo en la construcción y operación de infraestructura clave, sino también en una política de inversión y desarrollo que promueve el crecimiento del sector energético nacional. Estos esfuerzos colocan a México en una posición estratégica frente a los retos globales y subrayan la importancia de una gestión energética responsable y orientada al futuro.
Con el avance hacia la autosuficiencia de gasolinas y diésel, México se encamina a cerrar este sexenio con importantes logros en materia energética, sentando las bases para una era de soberanía, seguridad y prosperidad energética que beneficiará a las futuras generaciones. Este esfuerzo conjunto entre el gobierno, Pemex y la sociedad, refleja un compromiso inquebrantable con el desarrollo sostenible y la independencia económica del país.