Desesperación en Michoacán: Exigen Justicia y Respuestas en Caso de Jóvenes Desaparecidos

En una dramática manifestación frente a Casa Michoacán –antes Casa de Gobierno-, los familiares de tres jóvenes desaparecidos el pasado 3 de octubre en Jiquilpan, Michoacán, exigieron a las autoridades que intensifiquen la búsqueda de sus seres queridos. Hasta la fecha, no se ha obtenido ninguna información que permita dar con su paradero, y la angustia y desesperación de las familias crece con cada día que pasa sin noticias.

El caso involucra a Bernardo Cruz Borja, de 33 años, Primo Cruz Borja, de 32 años, y su amigo Edgar Tavira Adame, de 23 años, quienes desaparecieron en circunstancias misteriosas después de haber entregado muestras de guacamole en el vecino estado de Jalisco. Estas muestras estaban destinadas a ser comercializadas en hoteles de diferentes partes del país, un negocio que los tres jóvenes emprendedores habían estado desarrollando con éxito.

El doctor Primo Cruz Borja, padre de dos de los jóvenes desaparecidos, fue quien encabezó la manifestación y hizo un llamado enérgico a las autoridades de seguridad tanto a nivel federal como estatal para que pongan todos sus recursos en la búsqueda de sus hijos y su amigo. “Exigimos que se trate este caso con la misma urgencia y determinación con la que se trató la desaparición de la alcaldesa de Cotija, Yolanda Sánchez Figueroa, quien desapareció en Zapopan, Jalisco, el pasado 25 de septiembre y fue localizada un día después. Para el caso de mis hijos y su amigo, no han hecho nada”, expresó con indignación el padre.

La preocupación de la familia Cruz Borja es comprensible, ya que los tres jóvenes llevaban una vida dedicada al trabajo y al comercio de aguacate en la región de Peribán, siendo miembros activos de la comunidad local. La desaparición repentina y sin rastro alguno ha conmocionado a la comunidad y ha dejado en vilo a todos los que conocen a estos jóvenes.

Según el relato del doctor Primo Cruz Borja, sus hijos y su amigo Edgar Tavira Adame realizaron un viaje a Jalisco con el propósito de entregar las muestras de guacamole a sus clientes en hoteles de Cancún. Sin embargo, su regreso a Michoacán se convirtió en un misterio cuando desaparecieron antes de llegar a Jiquilpan, donde tuvieron su última comunicación telefónica.

El vehículo en el que viajaban, una camioneta JAC Frisan T8, aún no ha sido localizada, lo que agrava la preocupación de los familiares. “Mis hijos vivían de su trabajo honrado y se dedicaban a llevar productos de nuestra región a diferentes partes del país. No tienen ninguna conexión con actividades ilegales, por lo que no entendemos por qué nadie ha hecho nada para encontrarlos”, lamentó Primo Borja.

La última comunicación con los desaparecidos tuvo lugar el 3 de octubre a las 17:40 horas, cuando se encontraban en Jiquilpan, en la región de la Ciénega de Chapala. Es importante señalar que esta zona es conocida por ser territorio del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), lo que añade un elemento de peligrosidad y preocupación a este caso.

Ante la falta de avances en la investigación y la creciente angustia de las familias, se llevó a cabo una marcha desde Casa Michoacán hasta el monumento Las Tarascas, y posteriormente los manifestantes se congregaron frente a Palacio de Gobierno. Con pancartas exigiendo respuestas y justicia, los familiares y amigos de los desaparecidos claman por la atención de las autoridades y la solidaridad de la sociedad.

Las autoridades locales y federales han sido criticadas por su aparente falta de acción en este caso, especialmente cuando se contrasta con la rapidez con la que se resolvió la desaparición de la alcaldesa de Cotija, Yolanda Sánchez Figueroa. La indignación pública ha llevado a la comunidad a cuestionar la equidad en la aplicación de la justicia y la protección de los derechos humanos en Michoacán.

El gobernador del estado, Luis Antonio Ramírez Pineda, ha emitido un comunicado en el que promete asignar recursos adicionales a la investigación y búsqueda de los jóvenes desaparecidos. Además, se comprometió a colaborar estrechamente con las autoridades federales para esclarecer lo sucedido y llevar a los responsables ante la justicia.

La Comisión Estatal de Derechos Humanos de Michoacán también se ha pronunciado en este caso y ha ofrecido su apoyo a las familias afectadas. El ombudsman estatal, Víctor Manuel Serrato Lozano, afirmó que se realizarán todas las acciones necesarias para garantizar que se respeten los derechos humanos de los desaparecidos y sus familias, y que se llevará a cabo una supervisión constante de la investigación.

Por su parte, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se pronunció sobre el caso durante su conferencia matutina y expresó su preocupación por la desaparición de los tres jóvenes. “Es un asunto que nos preocupa mucho, y estamos en contacto con las autoridades de Michoacán para garantizar que se haga justicia y se esclarezca lo ocurrido”, afirmó el mandatario.

El presidente López Obrador también anunció que se reforzará la presencia de la Guardia Nacional en la región de la Ciénega de Chapala para brindar mayor seguridad a la población y apoyar en las labores de búsqueda de los jóvenes desaparecidos. Además, instó a la población a colaborar con las autoridades proporcionando cualquier información que pueda ayudar en la investigación.

La sociedad michoacana se ha unido en solidaridad con las familias de los desaparecidos, organizando marchas y manifestaciones en diversas ciudades del estado. Grupos de derechos humanos y organizaciones civiles también han levantado la voz para exigir respuestas y justicia en este caso.