Rescatados del Abismo: Liberan a los 20 Vecinos de Altamirano Tras Horas de Angustia

En un acto de reconciliación y paz, las autoridades estatales anunciaron la liberación de los últimos 20 pobladores del municipio de Altamirano, quienes habían sido secuestrados en medio de la turbulenta disputa política que ha mantenido en vilo a esta comunidad durante meses. Esta liberación, que tuvo lugar en la madrugada del domingo, marca un importante paso hacia la resolución de un conflicto que ha afectado profundamente a los habitantes de la región.

Según un comunicado emitido por la delegación de Gobierno en la región, los 20 secuestrados, quienes habían sido privados de su libertad desde el 10 de octubre, finalmente regresaron sanos y salvos a sus hogares. Además, de manera simultánea, se procedió a retirar los bloqueos que habían sido instalados por los habitantes desde el 22 de agosto en las tres entradas a la cabecera de Altamirano. Estos bloqueos habían sido erigidos como una protesta en demanda de la destitución del concejo municipal.

Las autoridades identificaron a las personas liberadas como Anselmo Sánchez Pérez, Rogerio Hernández Gómez (presidente del comisariado ejidal), Deonicio Hernández Sántiz, Feliciano Santiz López, Pedro López Paniagua, Jacinto Méndez Sántiz, Domingo Méndez Sántiz, Felipe Gómez Sántiz, Óscar Aguilar Jiménez y Armando Aguilar Jiménez. Además, regresaron con sus familias Jesús Eduardo Rodríguez Trujillo, Amílcar Espinoza Luna, Amauri de Jesús Ortega Castellanos, Martín Díaz Narváez, Simón Sánchez Díaz, Carlos Alberto Sánchez López, Humberto Belizario Castellanos Gómez, Gilberto Sántiz López, Arturo Aguilar Sánchez y Nicolás Espinoza Sántiz.

El subsecretario de Gobierno, Jorge Cruz Pineda, reveló que el 10 de octubre pasado, aproximadamente 60 habitantes de Altamirano fueron retenidos en la carretera cuando regresaban de una reunión con funcionarios estatales en Tuxtla Gutiérrez. La reunión tenía como objetivo abordar el tema de la destitución del concejo municipal y la realización de una auditoría a las autoridades locales, en un esfuerzo por resolver las diferencias políticas que habían desencadenado la crisis en la comunidad.

El conflicto en Altamirano se había agravado en los últimos meses debido a las tensiones políticas entre dos grupos. Por un lado, el concejo municipal, encabezado por María García López, buscaba mantener el control del gobierno local. Por otro lado, el ex alcalde Roberto Pinto Kánter, del Partido Verde Ecologista de México, y su sucesora designada, Gabriela Roque Tipacamú, habían enfrentado obstáculos significativos para asumir el cargo debido a las protestas lideradas por el síndico del concejo municipal, Gabriel Montoya Osegura.

Este conflicto político había llegado a su punto máximo días antes del secuestro de los seguidores de Pinto Kánter, cuando un grupo de simpatizantes incendió 47 viviendas y una veintena de vehículos pertenecientes a partidarios del concejo municipal. Desde entonces, el concejo municipal había estado operando desde fuera de Altamirano, lo que agravó aún más la situación en la localidad.

La liberación de los secuestrados y la eliminación de los bloqueos son señales alentadoras de que se está trabajando en una solución pacífica para el conflicto. Sin embargo, queda mucho por hacer para restaurar completamente la tranquilidad y la estabilidad en Altamirano.

Las autoridades estatales y locales, junto con la colaboración de diversos actores políticos y la sociedad civil, deben seguir trabajando en conjunto para abordar las diferencias políticas y encontrar una solución duradera que beneficie a todos los habitantes de esta comunidad.

El gobernador del estado, quien ha estado siguiendo de cerca el conflicto en Altamirano, expresó su alivio por la liberación de los secuestrados y la desactivación de los bloqueos. Hizo un llamado a la calma y la unidad, instando a todas las partes involucradas a participar en un diálogo constructivo para resolver las diferencias políticas de manera pacífica y democrática.

Por su parte, María García López, presidenta del concejo municipal, agradeció a las autoridades estatales y a todos los involucrados en el proceso de liberación de los secuestrados. Se comprometió a trabajar incansablemente por el bienestar de Altamirano y sus habitantes.

Roberto Pinto Kánter, el ex alcalde y líder del grupo opositor, también se pronunció sobre la liberación de los secuestrados. Afirmó que este es un paso positivo hacia la reconciliación en la comunidad y se mostró dispuesto a colaborar en la búsqueda de una solución pacífica y democrática para el conflicto político.

La sociedad civil y las organizaciones de derechos humanos han desempeñado un papel crucial en la mediación y la promoción de la paz en Altamirano. Han instado a todas las partes a respetar los derechos fundamentales de los habitantes de la localidad y a comprometerse con un proceso de diálogo inclusivo y transparente.

El Secretario de Gobernación del estado, quien ha estado coordinando los esfuerzos para resolver el conflicto, anunció que se llevará a cabo una serie de mesas de diálogo entre las partes involucradas. Estas mesas tendrán como objetivo abordar las demandas y preocupaciones de ambas partes y trabajar hacia soluciones concretas.

Además de las mesas de diálogo, se ha propuesto la realización de una auditoría a las autoridades locales para garantizar la transparencia y la rendición de cuentas en la gestión pública. Esta medida busca abordar las preocupaciones sobre la gestión de recursos y la toma de decisiones en el municipio.

La comunidad internacional también ha estado siguiendo de cerca los acontecimientos en Altamirano. Varios países y organizaciones han expresado su apoyo a los esfuerzos de mediación y han instado a todas las partes a buscar una solución pacífica y democrática para el conflicto.