Crisis Humanitaria en Tapachula: 5 Mil Migrantes Abarrotan la Comar en Busca de Refugio
En una escena que refleja la creciente demanda de refugio en México, alrededor de 5 mil migrantes, el doble de lo visto en días recientes, se aglomeraron este miércoles en las inmediaciones de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) en Tapachula, Chiapas, en busca de iniciar sus trámites de solicitud de refugio.
Un servidor de la Comar, quien brinda información a los migrantes que se congregan afuera de la oficina, estimó que entre 5 y 7 mil solicitantes habían llegado en el transcurso del día. La dependencia, que hasta ahora ha estado atendiendo en promedio a 2 mil solicitantes al día, se enfrenta a una abrumadora demanda en un momento crítico.
Las largas filas, una para los haitianos y otra para los cubanos y otras nacionalidades, se extienden a lo largo de medio kilómetro, serpenteando fuera de la oficina de Los Laureles, donde la Comar lleva a cabo sus operaciones. La situación ha llevado a funcionarios de la Comar a tratar de mantener el orden a través de un sistema de megafonía.
“Despejen esta área, es solo para entrada y salida de vehículos, vayan a formarse”, se les ordena a los migrantes mientras se intenta mantener el acceso al edificio principal, el mismo lugar donde el pasado lunes se registraron disturbios protagonizados por migrantes haitianos.
En medio de las filas, los empujones y los gritos son una constante, ya que los migrantes intentan avanzar y asegurarse un lugar en la cola.
“Esto estaba desorganizado, nadie se ponía en fila y la gente se colaba constantemente”, relató Alberto Oliva, uno de los migrantes presentes. Sin embargo, añadió que desde el día anterior se ha notado una mejor organización en comparación con días anteriores, cuando la gente se amontonaba en la entrada sin ningún tipo de control.
“Ya hay un orden, la gente tiene otro semblante, todos se están organizando, y el flujo para ingresar ha mejorado”, explicó Oliva mientras esperaba su turno pacientemente.
Mabel Cabrera, una migrante cubana, finalmente logró ingresar a las oficinas de la Comar después de tres largos días de espera, incluso teniendo que dormir en el suelo afuera de las instalaciones.
“Estoy aquí pasando hambre y fatiga, me ha pasado de todo”, expresó con desesperación la mujer que busca reunirse con su esposo en Estados Unidos. Su experiencia refleja las difíciles condiciones que muchos migrantes enfrentan en su búsqueda de un futuro mejor.
Los migrantes presentes hicieron un llamado urgente a las autoridades para que amplíen el horario de atención y asignen más personal para atenderlos, ya que cada día miles quedan afuera esperando ser atendidos al día siguiente.
La Comar en Tapachula ha enfrentado un año de altísima demanda, habiendo atendido hasta la fecha a más de 53 mil solicitantes, una cifra significativa considerando los casi 100 mil registrados en todo el país. Esta situación ha llevado a las autoridades a considerar la reubicación de la oficina de Los Laureles hacia el Parque Ecológico de Los Cerritos, en el sur de la ciudad, donde se cuenta con un espacio más amplio para lidiar con la oleada de solicitantes.
La oleada de migrantes en Tapachula es un claro reflejo de los desafíos que México enfrenta en el ámbito de la migración en la actualidad. La situación se ha vuelto cada vez más compleja debido a factores como la inestabilidad económica y política en varios países de América Latina, así como el aumento de la migración internacional en busca de mejores oportunidades de vida.
El Gobierno de México ha expresado su compromiso de abordar esta situación de manera humanitaria y respetando los derechos de los migrantes. Sin embargo, la abrumadora demanda y los desafíos logísticos que esto conlleva plantean un reto significativo para las autoridades, que buscan equilibrar la atención a los solicitantes de refugio con la necesidad de mantener un control adecuado de las fronteras y garantizar la seguridad de todos los ciudadanos.
Es importante destacar que México ha sido históricamente un país que ha brindado refugio a personas que huyen de la persecución y la violencia en sus países de origen. La Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) desempeña un papel crucial en este proceso, evaluando las solicitudes de refugio y proporcionando protección a quienes cumplen con los criterios establecidos.
Sin embargo, el aumento en la llegada de migrantes ha llevado a un incremento en la presión sobre la Comar y otros organismos encargados de la atención de solicitantes de refugio. La necesidad de expandir las operaciones y encontrar soluciones a largo plazo se ha convertido en una prioridad para el gobierno mexicano.
Las autoridades han reiterado su compromiso de trabajar en coordinación con organismos internacionales y otros países de la región para abordar los factores subyacentes que impulsan la migración y buscar soluciones a largo plazo. Además, se están implementando medidas para mejorar la capacidad de atención de la Comar y garantizar que se respeten los derechos de los migrantes durante todo el proceso.
A medida que la situación en Tapachula continúa desarrollándose, se espera que las autoridades tomen medidas adicionales para hacer frente a la creciente demanda. Mientras tanto, los migrantes que esperan pacientemente su turno afuera de la Comar mantienen la esperanza de un futuro mejor y una oportunidad para reconstruir sus vidas en un nuevo país.