Histórica Reforma: ¡Adiós al Doble Congreso! Diputados Aprueban Medida para Resolver Contradicción Constitucional

En un movimiento sorprendente y unánime, todas las bancadas representadas en la Cámara de Diputados han votado a favor de una histórica reforma al artículo 65 de la Constitución, marcando un hito en el camino hacia una mayor coherencia y claridad en el sistema legislativo. La enmienda tiene como objetivo evitar la coexistencia de dos legislaturas en el mismo mes y, en consecuencia, acabar con una contradicción que se arrastraba desde la reforma político-electoral de 2014.

El corazón de esta reforma se centra en el ajuste de los términos de los legisladores en funciones. Concretamente, se ha propuesto que tanto los senadores como los diputados concluyan su mandato el 31 de agosto de 2024. La enmienda, después de ser aprobada en la Cámara de Diputados, será sometida al Senado para su revisión y, en su caso, aprobación final. Si todo avanza según lo planeado, esta modificación constitucional podría marcar el fin de un fenómeno político y legal que ha desconcertado a la nación durante años.

El problema se origina en la reforma político-electoral de 2014, que introdujo un inusual desfase en los tiempos de cambio de legislaturas. Esta reforma, si bien logró recorrer un mes el inicio de la próxima legislatura, no tuvo un impacto en el término de la 65 Legislatura en funciones. Durante su tiempo en la tribuna, varios diputados subrayaron el absurdo inherente a esta contradicción, que amenaza con desencadenar una irregularidad constitucional al permitir la existencia simultánea de dos legislaturas.

El diputado Juan Ramiro Robledo, miembro del partido Morena y presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, tomó la palabra para explicar los detalles de esta enmienda histórica. “No se trata de agregar un mes a la actual Legislatura”, declaró con convicción, “no se afecta el presupuesto ni se le quita a nadie el derecho de nada porque la 66 legislatura no existe aún y el próximo presidente tendrá las atribuciones que la Constitución y las leyes le dan, cuando asuma el 1º de octubre, con la legislatura debidamente instalada”.

La medida ha sido recibida con aplausos por una amplia gama de actores políticos y ciudadanos, que ven en esta reforma un avance significativo hacia la claridad y coherencia en el sistema legislativo. Expertos en derecho constitucional han elogiado la iniciativa por abordar una inconsistencia que, hasta ahora, había desafiado la lógica y el sentido común. El profesor Adrián Sánchez, experto en derecho constitucional y docente en una prestigiosa universidad, comentó que “esta reforma era esencial para evitar posibles conflictos y dudas legales en el futuro. Es un paso necesario hacia un sistema legislativo más transparente y funcional”.

La 65 Legislatura, que se había conformado con la expectativa de funcionar desde el 1º de septiembre de 2021 hasta el 31 de agosto de 2024, ahora está en el epicentro de esta reforma. Se espera que esta enmienda no solo solucione la contradicción actual, sino que también establezca un precedente para futuros ajustes en la legislación electoral y política. Los diputados, en su papel de representantes del pueblo, han tomado la iniciativa para abordar esta cuestión con decisión y responsabilidad.

La perspectiva del Senado, que ahora debe revisar y aprobar la reforma propuesta, se presenta como un nuevo capítulo en esta saga legislativa. Las miradas están puestas en el próximo debate y en la posible continuación de la senda de consenso y coherencia que la Cámara de Diputados ha iniciado. Si el Senado se muestra a la altura de las circunstancias y aprueba la enmienda, podría allanarse el camino hacia una solución definitiva a una controversia que ha desconcertado a la nación durante años.

En resumen, la aprobación unánime en la Cámara de Diputados de la reforma al artículo 65 de la Constitución representa un paso trascendental hacia la corrección de una contradicción constitucional que ha desconcertado a la nación desde 2014. Con el voto de todas las bancadas, se busca evitar la coexistencia de dos legislaturas en el mismo mes y establecer un precedente para futuras reformas políticas y electorales. La enmienda propuesta ha sido aplaudida por expertos en derecho constitucional y ciudadanos por igual, como un avance significativo hacia un sistema legislativo más transparente y coherente. Ahora, todas las miradas están puestas en el Senado, que debe revisar y, en su caso, aprobar esta reforma histórica que podría marcar el fin de una controversia arraigada en el sistema político del país.