Inversión extranjera en México: Estabilidad y crecimiento
La estabilidad macroeconómica que ha caracterizado a la administración federal durante cinco años ha desempeñado un papel fundamental en el fortalecimiento de la confianza de las empresas, tanto nacionales como extranjeras, lo que se ha traducido en un notable aumento en la inversión extranjera directa (IED), según el quinto Informe de Gobierno.
En el primer semestre de este año, México recibió una inversión extranjera directa de 29 mil 41 millones de dólares, un 41 por ciento más que en el mismo período del año anterior, excluyendo operaciones extraordinarias como las de Televisa-Univisión y Aeroméxico realizadas en el primer semestre de 2022.
De este total, 22 mil 608 millones de dólares corresponden a reinversiones, 4 mil 297 millones a transacciones entre empresas y 2 mil 135 millones a nuevas inversiones. Además, 16 mil 884 millones de dólares se destinaron a la industria manufacturera, y 12 mil 370 millones provienen de inversores estadounidenses.
El Gobierno de México destacó la identificación de cinco industrias estratégicas que guían su política industrial y promueven la relocalización de empresas involucradas en cadenas de valor. Se han llevado a cabo reuniones en el sector de semiconductores y circuitos impresos para atraer inversión y fortalecer las cadenas de valor, generando empleos más especializados y mejor remunerados.
El país se ha convertido en un destino atractivo para inversiones, en parte debido a la estrategia de atraer inversión al Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec y al aprovechamiento de las oportunidades proporcionadas por el T-MEC para integrar a más empresas en las cadenas de suministro de América del Norte.
Sin embargo, el Gobierno de México también ha defendido los intereses nacionales frente a demandas presentadas por inversores extranjeros en el contexto de varios acuerdos comerciales, como el T-MEC, en temas como la vaquita marina, totoaba, energéticos y maíz genéticamente modificado.