Ana Lilia Rivera: Elegida para Presidir el Senado en Batalla Interna de Morena
En un proceso de votación reñida y con gran expectación, el partido político Morena ha seleccionado a Ana Lilia Rivera como su candidata para presidir el Senado durante el último año de la actual legislatura, que dará comienzo mañana.
Ana Lilia Rivera, conocida por su compromiso con la transformación política y social que impulsa Morena, fue proclamada como la opción principal en una votación interna. Tras el anuncio, Rivera expresó con satisfacción: “Llego limpia, llego con los votos libres y honestos de mis compañeros. Eso me permite ser una presidenta a su servicio, al servicio del Senado y del gran movimiento de transformación al que pertenecemos”. Rivera obtuvo 32 votos a favor, prevaleciendo sobre Maribel Villegas, quien contó con el respaldo de 26 legisladores afines al ex coordinador Ricardo Monreal.
La candidatura de Ana Lilia Rivera será sometida a una votación por parte de todas las fuerzas políticas representadas en el pleno del Senado. Esta elección no solo marca un paso significativo para la dirección interna de Morena, sino que también tiene implicaciones más amplias para la conducción legislativa en el próximo año.
En su discurso dirigido a sus colegas, Ana Lilia Rivera manifestó su respeto por Maribel Villegas, al tiempo que puso al descubierto las maniobras de cabildeo que habían tenido lugar en favor de la candidatura rival. La ahora candidata lamentó la formación de grupos dentro de la bancada que respaldaban a diferentes aspirantes para la sucesión de Andrés Manuel López Obrador en el año 2024. Rivera expresó con franqueza: “Quiero decirles algo que me da mucha tristeza, aunque todos estamos inmersos en el proceso interno nacional, donde Morena va a elegir al coordinador de la 4T y eso ha permeado al interior de los grupos parlamentarios y de todas las instituciones y la sociedad. Quiero decirles que yo, que yo que soy una constructora de este movimiento, me queda claro que uno no viene a hacer grupos, uno viene a servir a la patria”.
La política, con una claridad de principios que resonó en su discurso, continuó: “Compañeros, yo no me acerqué a nadie de ustedes a pedirles su voto poniendo por el frente a algún aspirante a la presidencia o a la coordinación de la Cuarta Transformación, porque me queda claro la calidad moral que es la que me representa y los representa. Si alguien vino a hacer aquí grupo, qué pena, lo siento mucho. Yo estoy a las órdenes y al servicio de todas y todos ustedes, porque he comprendido que solo con calidad moral uno puede mirar de frente a todas y todos”.
El enfrentamiento entre las facciones internas de Morena se reflejó igualmente en la elección de la vicepresidencia de la mesa directiva del Senado, un puesto de relevancia que también recae en los miembros del partido. Casimiro Méndez y Sergio Pérez Flores empataron con 29 votos cada uno, generando un dilema sobre quién ocuparía el puesto. En un giro inesperado, la senadora Nancy Sánchez propuso que Maribel Villegas ocupara la vicepresidencia.
Sin embargo, esta propuesta no fue recibida de manera unánime. La senadora Margarita Valdez expresó su oposición, rechazando lo que denominó “arreglitos” poco transparentes. Mónica Fernández y el propio Sergio Pérez se sumaron a la oposición, dando lugar a una repetición de la votación para definir la vicepresidencia.
La elección de Ana Lilia Rivera como aspirante a presidir el Senado no solo marca un hito en la trayectoria política de la candidata, sino que también revela las tensiones y las dinámicas internas en el seno del partido Morena. Con la votación final aún pendiente en el pleno del Senado, el escenario político sigue siendo incierto en cuanto a la dirección que tomará la cámara alta en los próximos meses. Las decisiones tomadas en este proceso interno tendrán un impacto en la forma en que Morena continuará liderando el panorama político y legislativo del país, y en cómo se alinea con los objetivos de la Cuarta Transformación impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.