Industriales en Nuevo León se unen contra la escasez de agua
La grave escasez de agua que ha golpeado a la zona metropolitana de Monterrey ha llevado a los industriales del estado a tomar medidas drásticas. En un esfuerzo por combatir la crisis hídrica que se avecina, los industriales de Nuevo León han anunciado su disposición a aportar una mayor cantidad de agua extraída de sus pozos. Esta iniciativa busca aliviar la presión sobre el suministro de agua, mientras que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) advierte que las previsiones de lluvia no traerán alivio significativo a las presas de la región.
La situación ha llevado a Agua y Drenaje de Monterrey a tomar medidas de emergencia, bombeando agua desde la presa Cerro Prieto, que actualmente se encuentra apenas al 10 por ciento de su capacidad. Las autoridades han tomado esta medida para asegurar un suministro mínimo a la población. Sin embargo, la preocupación sigue creciendo a medida que la escasez de agua empeora.
En respuesta a esta crisis, Juan Pablo García Garza, director de la Cámara de la Industria de Transformación de Nuevo León (Caintra), declaró que las empresas afiliadas están dispuestas a aumentar su contribución al suministro de agua. García Garza afirmó: “Si las cosas se siguen agravando, que espero que no, pues obviamente claro que vamos a seguir aportando. Yo creo que el sector privado lo seguirá haciendo en la medida de lo posible, haremos todo lo que se pueda para solventar esto”. La Caintra actualmente contribuye con aproximadamente 29 millones de metros cúbicos de agua a la red de Agua y Drenaje de Monterrey, siendo un actor clave en la distribución de agua en la metrópoli.
El empresario enfatizó la importancia de la colaboración en momentos de crisis: “Todos tenemos que aportar de nuestra parte, porque todos vivimos aquí. Las familias de los empleados, de los ejecutivos, todos aquí estamos, todos necesitamos agua, entonces todos tenemos que colaborar para ello”.
La estrategia del Gobierno de Nuevo León para enfrentar la crisis incluye la estimulación de lluvias mediante vuelos de bombardeo de nubes. En lo que va del año 2023, se han realizado 53 vuelos con el propósito de impulsar la formación de precipitaciones. Estos vuelos se llevan a cabo utilizando el avión King Air 250, que rocía yoduro de plata y acetona sobre las nubes para acelerar el proceso de lluvia. Esta técnica se ha aplicado en varias áreas, incluyendo la cuenca de la presa Cerro Prieto, que es esencial para el abastecimiento de agua en la región metropolitana.
A pesar de estos esfuerzos, la Conagua ha advertido que las previsiones de lluvia asociadas a una depresión tropical en el Golfo de México no serán suficientes para aliviar la escasez de agua en Nuevo León. Se espera que la mayoría de las lluvias se dirijan hacia el estado de Texas en los Estados Unidos.
En cuanto a la presa Cerro Prieto, Agua y Drenaje de Monterrey ha implementado el bombeo emergente como medida para asegurar el suministro mínimo. La presa actualmente se encuentra solo al 10.5 por ciento de su capacidad total, con un almacenamiento de 31.5 millones de metros cúbicos de agua, muy por debajo de su capacidad máxima de 300 millones de metros cúbicos. Las bombas flotantes se utilizan para extraer agua cuando el nivel del embalse es demasiado bajo para llegar a la boca de toma. Esta medida se aplicó previamente durante la crisis del año pasado y se ha vuelto a implementar debido a la gravedad de la situación actual.
A pesar de las previsiones climáticas que anuncian lluvias intensas para el norte de Nuevo León, la Conagua ha indicado que estas lluvias no serán suficientes para llenar las cuencas de las presas El Cuchillo, Cerro Prieto y La Boca. Se espera que las precipitaciones se concentren principalmente en el norte de la región, lo que podría traer algún alivio, pero no resolverá por completo la crisis hídrica que enfrenta Nuevo León.
La combinación de esfuerzos por parte de los industriales, las autoridades gubernamentales y las medidas de emergencia busca enfrentar la escasez de agua que afecta gravemente a la zona metropolitana de Monterrey. Mientras tanto, los residentes y las empresas de la región esperan con ansias cualquier signo de alivio en esta crisis que amenaza la vida cotidiana de miles de personas.